Continuando con el artículo, mencionábamos la importancia de realizar un buen diagnóstico de las necesidades de los clientes para elegir la mejor estrategia de desarrollo del personal; así como compartimos las distinciones de los roles y competencias del coach, facilitador y capacitador; hoy queremos concluir con las siguientes preguntas:

¿Cuáles son las habilidades comunes en de los profesionales del desarrollo del talento humano?

¿Cuándo utilizar una de las estrategias o combinación para lograr los objetivos del proyecto de desarrollo organizacional?

Podemos mencionar que el coach, el facilitador y el capacitador se distinguen por las siguientes más importantes competencias en común, relacionadas básicamente a sus capacidades emocionales y de comunicación:

Habilidades de comunicación y escucha

Realizar buenas preguntas

Capacidad de Interactuar con diferentes tipos de personas y crear acuerdos/ aprendizajes/cambios conductuales

Habilidades interpersonales

El rol del coach es acompañar a una persona a descubrir, aclarar y definir lo que quiere alcanzar, estimulando su autoconocimiento en un proceso reflexivo, propiciando su creatividad para la toma de decisiones por el mismo descubriendo sus potencialidades personales y profesionales. Un coach no es experto ni necesita serlo en la situación del cliente, si en el dominio en la práctica de competencias personales, éticas y comunicacionales.

Un facilitador apoya a un grupo de personas a mejorar la forma en que identifica, soluciona problemas y toma decisiones, para aumentar su efectividad. No es experto ni necesita serlo en las situaciones a tratar en la sesión de facilitación; Es experto en la metodología para preparar y planificar la sesión previa a su ejecución, en la utilización de herramientas técnicas de discusiones productivas, competencias personales y comunicacionales.

El capacitador tiene como rol básico, transmitir conocimientos a un grupo de personas en temas en lo que es un experto. Entregando la transferencia de habilidades necesarias para que una persona sea exitosa profesionalmente.

Estas estrategias pueden ser: programas de formación de capacidades técnicas o conductuales, desarrollo de potencialidades de los empleados, mejora de las relaciones colaborativas, acompañamiento a los líderes para desarrollar habilidades de liderazgo y otros que permitan eliminar barreras de desempeño y óptimos resultados.

El coaching, capacitación o facilitación permite cubrir necesidades de desarrollo del personal frente a estas diferentes situaciones en el orden grupal / individual y frente a conocimientos internos o externos para el personal involucrado.

El Rol de cada profesional en estas disciplinas juega un papel importante para explorar los objetivos a lograr; así como las claves de éxito en su desarrollo e implementación. Veamos como traducimos esto en unas distinciones que permitan en la práctica darnos cuenta cual utilizar en la problemática actual de las organizaciones de nuestros clientes.

Escogiendo la estrategia correcta para obtener resultados.

Como consultores en las organizacionales, el ofrecer a los clientes las mejores soluciones para resolver las situaciones de cerrar brechas entre el desempeño de los colaboradores, la productividad y el cumplimiento de las metas organizacionales, es un reto de amplias posibilidades.

Al realizar el primer contacto con un cliente debemos ir preparados con una guía de preguntas que nos permitan contestar la siguiente en primer orden:

<strong>¿A qué problemas/ retos se está enfrentando su organización en este momento?</strong>

Como gestores de soluciones en desarrollo organizacional debemos objetivamente investigar la realidad actual del cliente, los retos que enfrentan, los cambios a que están sometidos, contexto social, rasgos de la cultura y el entorno. De esta manera podemos en nuestra propuesta de acompañamiento ofrecer estrategias distintas, enfocadas a resolver diversas situaciones, no exclusivamente el objetivo primario del cliente.